CASO DE ESTUDIO 1: ECO2BLOCKS (Portugal)
Pedro Humberto, estudiante de doctorado de la Universidad de Beira Interior (UBI), inventó los ECO2BLOCKS en 2018.
Pedro descubrió que el proceso de fabricación de los bloques de cemento tradicionales consume mucha energía y emite mucho CO2, al tiempo que utiliza materias primas naturales como agua potable, arena de río y grava. Así que, como parte de su tesis doctoral y en colaboración con su mentor João Castro -profesor de la Facultad de Ingeniería Civil y Arquitectura de la UBI-, intentó encontrar una forma más sostenible de producir bloques de cemento. Tras varias pruebas, encontraron un material muy similar al hormigón y mucho más sostenible y menos perjudicial para el medio ambiente.
El material que han desarrollado utiliza residuos industriales mezclados con agua no potable o agua de mar y residuos. El material se convierte en un bloque de construcción en un entorno especialmente creado para el endurecimiento, donde predomina el CO2: se trata de un proceso de carbonización, a diferencia del cemento, que se endurece mediante un proceso de hidratación.
El coste de este material es un 50% inferior al del hormigón tradicional, es mucho más resistente y se asemeja a un bloque de hormigón. La principal diferencia es el color y la densidad, pero esta cuestión también se ha resuelto: este bloque resiste hasta 900 ºC, mientras que el hormigón normal sólo resiste 400 ºC.