
Este capítulo se centra en la separación de residuos como una de las formas más populares de protección del medio ambiente. La recogida selectiva de residuos permite reciclarlos para que puedan volver a utilizarse. La sobreexplotación de los recursos naturales, el crecimiento demográfico y la activa actividad comercial estimulan la creación de residuos, y una de las formas más eficaces de tratarlos es el reciclado. Dado que casi dos tercios de los residuos domésticos están formados por componentes orgánicos que se biodegradan de forma natural, el compostaje doméstico es la medida más sencilla y eficaz que podemos adoptar para reducir los residuos y mejorar al mismo tiempo la salud del suelo. Introducir el compostaje como forma natural de reciclar es otra de las ideas que aporta este capítulo.